La globalización y la digitalización han aportado cosas buenas pero también peligros que debemos entender y combatir, entre ellos quiero destacar los desequilibrios sectoriales con consecuencias negativas para nuestra clase media.
Esa clase media que en la segunda mitad del siglo XX fue creciendo sin cesar y que en el siglo XXI debemos seguir incentivando.
En los últimos 20 años la industria y el comercio minorista han ido perdiendo peso progresivamente en favor de otros sectores, de los que cada vez somos más dependientes. Esta tendencia nos debilita.
La construcción de un tejido industrial o de una red de comercios minoristas muy diseminada se realiza poco a poco, a lo largo de muchos años, sin embargo se destruye con rapidez.
Juntos podemos frenar esta tendencia:
✔️ Para mantener y crear empleos de calidad.
✔️ Para que nuestros jóvenes encuentren aquí distintas opciones de desarrollar su vida laboral.
✔️ Por todos nuestros seres queridos que viven directa o indirectamente del comercio minorista y de la industria.
✔️ Para generar riqueza distribuirla mejor.
✔️ Para tener una economía equilibrada, que afronte con mayor solvencia las dificultades futuras.
✔️ Para tener comercios de proximidad.
✔️ Para ser mas sostenibles y cuidar el planeta.
Yo pienso en global pero actúo en local.
Soy ciudadano del mundo pero compro en mi localidad, productos FABRICADOS en España.